¿Cómo optimizar el tiempo de trabajo y el control horario en la empresa?

“Lo único que realmente nos pertenece es el tiempo” - Baltasar Graciá.

“El tiempo es a la vez el más valioso y el más perecedero de nuestros recursos” - John Randolph.

 

Importancia de la optimización del tiempo de trabajo

Optimizar el tiempo es fundamental para la productividad, especialmente para las empresas. Establecer y planificar las jornadas laborales de todo el personal puede resultar una tarea muy compleja, así como equilibrar la vida profesional y personal. Por ello, gestionar el tiempo es esencial para la sostenibilidad de la organización.

Es importante empezar resaltando que la velocidad no siempre es igual a la eficacia. Y es que, la diferencia entre trabajar mucho y trabajar bien es esencial para lograr una productividad efectiva. Gestionar el tiempo de manera eficaz implica establecer prioridades, eliminar distracciones y utilizar herramientas adecuadas para mantener un enfoque constante en las tareas más importantes. La planificación y la organización son claves para lograr este equilibrio. Además, cabe destacar que los descansos y vacaciones son cruciales para mantener una alta productividad a largo plazo.

 

Control horario

Realizar una efectiva gestión del tiempo implica emplear el sistema de registro horario adecuado y mejorarlo de manera constante. Esto permitirá manejar imprevistos de manera ágil y sin pérdida excesiva de tiempo. 

El control de tiempo en una empresa hace referencia al registro de horas y turnos de trabajo de los empleados durante su jornada laboral para determinar la duración total. Por ello, es necesario contar con sistemas de control adaptados a la flexibilidad horaria de cada uno de los trabajadores. Gracias al control horario de aTurnos, podrás registrar los fichajes de entrada y salida de los trabajadores, para cumplir así con el Registro Diario de la Jornada y conocer el exceso o defecto de horas trabajadas respecto a las planificadas. Existen varios sistemas para el control horario, en el siguiente enlace te recomendamos el más adecuado para tu empresa: ¿Qué tipo de control horario recomendamos a tu empresa?

La eficiencia del trabajo se ve directamente influenciada por el tiempo invertido en él. Cualquier tarea que se emprenda requiere una asignación adecuada de tiempo, independientemente de su duración. Además, al comprender esta información, es posible implementar mejoras para optimizar la producción y obtener el mejor resultado posible. Con aTurnos puedes organizar los servicios de tu empresa para que los clientes puedan solicitar ser atendidos en una determinada actividad e informar y asignar las tareas ajustadas a la planificación de los empleados. Para más información puedes consultar nuestro manual: Módulo de Tareas.

Otro aspecto relevante está relacionado con la motivación. Si a alguien se le diera un tiempo infinito para realizar una tarea, es probable que nunca la acabase. Al establecer límites temporales, el empleado se ve obligado a planificar y minimizar las distracciones. Esto a su vez lo impulsará a encontrar métodos más eficientes para llevar a cabo sus tareas de manera más rápida con cada intento.

 

¿Qué horas son más productivas para trabajar?

A lo largo de una jornada laboral estándar de ocho horas, se estima que solamente alrededor de una hora y media o dos se emplean en actividades que realmente aportan valor. 

Las horas más productivas de trabajo varían dependiendo de diversos factores, como el tipo de trabajo, las preferencias personales y los ritmos circadianos individuales. Sin embargo, generalmente se ha observado que muchas personas tienden a ser más productivas durante las primeras horas de la mañana y en la primera parte de la tarde. Estos momentos suelen estar relacionados con niveles de energía más altos y una mayor concentración, por lo que se recomienda abordar tareas que requieren enfoque y toma de decisiones.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que cada persona es diferente. Algunas personas pueden ser más productivas durante las horas de la tarde o incluso en la noche. La clave es comprender y establecer tus propios ritmos para organizar las tareas más importantes durante los momentos en los que te sientas más concentrado.

 

Consejos para optimizar el tiempo de trabajo

 

Establecer objetivos y metas claras

Gracias a una planificación y definición previa de tus objetivos específicos y medibles para cada día o período de trabajo, te proporcionará un sentido de dirección y te ayudará a enfocarte en las tareas más importantes.

 

Delegar tareas

Delegar tareas que no requieren tu atención directa o pueden ser realizadas por otras personas, te liberará tiempo de trabajo y te permitirá enfocarte en las tareas más importantes.

 

Diferenciar entre urgente e importante

Prioriza tareas según su urgencia y relevancia, evitando ocuparse sólo de asuntos urgentes a expensas de lo importante.

 

Organizar y planificar semanalmente o mensualmente

Planifica tu semana y mes con tareas urgentes e importantes, siendo realista sobre el tiempo necesario y dejando espacio para imprevistos mediante calendarios.

 

Automatizar procesos

Utiliza herramientas y tecnologías eficientes para automatizar algunas de las tareas más complejas y repetitivas dentro de una organización como puede ser la planificación, control horario, nóminas, etc. Esto puede ahorrarte tiempo y esfuerzo en el largo plazo.

 

Establecer pausas y descansos

Es necesario establecer pausas o descansos y además desconectar fuera del horario laboral para recargar energías y mantener la productividad. Además es necesario cumplir con los horarios de trabajo y evitar que el trabajo se extienda indefinidamente en tu tiempo personal.

 

Tener reuniones de trabajo efectivas

Evalúa si una reunión es necesaria y opta otra forma de comunicación cuando sea posible, para evitar una pérdida de tiempo.

 

Identificar distracciones y conseguir la concentración

Identifica las distracciones comunes y busca formas de minimizarlas. Apaga notificaciones innecesarias y distracciones y establece límites para crear un entorno de trabajo tranquilo y enfocarte en tareas que requieren concentración intensa.

 

Colaborar y comunicarse

Ambas resultan imprescindibles para optimizar los procesos de trabajo. Cuando las distintas partes de la organización trabajan juntas en lugar de operar de manera aislada, se puede lograr una sinergia que acelera el flujo de trabajo y evita duplicaciones innecesarias.

 

Formarse y mejorar continuamente

Invierte tiempo en formaciones y aprender nuevas habilidades que puedan aumentar tu eficiencia en el trabajo. Estar al tanto de las últimas herramientas y técnicas puede marcar la diferencia.